Pulgas y "enfermedad por arañazo de gato"

la "enfermedad por arañazo de gato" afecta mucho más al hombre que a los gatos. Se debe a una bacteria que puede inocularse cuando un gato araña (o muerde) a alguien. Las lesiones provocadas por las garras y los dientes afilados de los gatos son difíciles de desinfectar porque son estrechas y profundas.

No hay señales aparentes en gatos.

El otro nombre para la “enfermedad por arañazo de gato” es Bartonelosis: los agentes responsables de la enfermedad son de hecho las bacterias Bartonella spp. y, en los gatos infectados, estas bacterias viven dentro de los glóbulos rojos. Los gatos jóvenes y los gatos callejeros son los "transmisores" más importantes de las bartonellas.

Una pulga puede absorber Bartonella spp. cuando muerde a un gato infectado y luego transmitirlas a otro gato si cambia de huésped. ¡Aproximadamente el 30% de los gatos infestados de pulgas son portadores de esta bacteria! El mayor riesgo de “enfermedad por arañazo de gato” en humanos ocurre cuando estamos en contacto con gatitos portadores de pulgas.

Una enfermedad que no siempre es benigna

En los gatos, la infección no suele causar ningún signo en particular, a excepción de una fiebre pasajera y, a veces, un aborto en las hembras preñadas. En los seres humanos, por otro lado, la enfermedad debe sospecharse cuando, de 3 a 10 días después de un arañazo o una mordedura de gato, se desarrolla una vesícula roja en el área de la inoculación, a menudo con pus en el interior, asociada con adenopatías regionales, abscesos, formación y posiblemente fiebre. Estos casos no complicados suelen ser autolimitados.

Los pacientes inmunocompetentes suelen sufrir la forma clásica de la enfermedad por arañazo de gato (CSD, siglas en inglés) con formación de pústulas en el lugar de la infección, linfadenopatía regional, formación de abscesos y posiblemente fiebre. La mayoría de los casos de CSD sin complicaciones son autolimitados, pero pueden durar meses hasta que se resuelvan por completo. Este síndrome de enfermedad responde sólo mínimamente o nada en absoluto a la terapia antimicrobiana. El curso de la enfermedad es mucho más complicado en pacientes inmunodeprimidos y niños. Pueden desarrollarse peliosis bacilar, angiomatosis bacilar, endocarditis (inflamación del músculo cardíaco), retinitis (inflamación de la retina) y encefalopatías. En tales casos, la terapia antimicrobiana está indicada y generalmente es efectiva.

Cuando el diagnóstico se hace rápidamente, la enfermedad por arañazo de gato se trata con relativa facilidad, si es necesario con un tratamiento antibiótico adecuado. 

No olvide hablar con su médico sobre la mordedura o el rasguño de un gato en las próximas semanas o meses, antes de que aparezcan los síntomas.

Prevención de la enfermedad por arañazo de gato

Siempre debemos lavarnos las manos después de haber acariciado o jugado con un gato. Ésta es una precaución básica contra el riesgo de una posible contaminación bacteriana.

¡También debemos evitar que un gato nos arañe o muerda! Esta evidencia debe recordarse a los niños que deben aprender a respetar al gato. ¡No lo despiertes cuando esté durmiendo! ¡No los jales por la cola!

Trate siempre a su gato contra las pulgas, respetando las recomendaciones prácticas para la administración y la periodicidad de los tratamientos. No solo mejorará el bienestar de su gato al evitar la picazón innecesaria, sino que también limitará la probabilidad de que se contamine con el agente de la enfermedad del rasguño del gato.